La Comisión Europea ha realizado sus primeras inversiones directas en startups de toda Europa. Se trata de una operación que engloba a 42 empresasy que pretende cubrir la brecha de financiación e impulsar la innovación en el continente.
Esta apuesta se enmarca en el nuevo Fondo del Consejo Europeo de Innovación, y dotará a cada una de las empresas de una inyección de capital que oscila entre los 500.000 euros y 15M€, con una inversión total de 178 millones. Las empresas pertenecen a diferentes sectores, que incluyen salud, economía circular y fabricación avanzada.
Esta es la primera vez que la Comisión realiza inversiones directas de capital, y se espera que las participaciones en la propiedad oscilen entre el 10% y el 25%. Según reconocen desde la propia Comisión, se trata de una medida que marca un «cambio de paradigma» para la financiación europea, lejos de las subvenciones, y tiene como objetivo ayudar a las empresas a competir con sus homólogos estadounidenses y asiáticos.
POTENCIAR EL ECOSISTEMA EUROPEO
Desde el organismo europeo destacan el gran número de nuevas empresas que se originan cada año, gracias en parte a la investigación de las universidades y que tiene como resultado un amplio reconocimiento en distintivos del nivel del premio Nobel. Sin embargo, son conscientes de que el número de unicornios europeos es limitado y el mercado de capital riesgo es de tres a cuatro veces más pequeño que en Estados Unidos, lo que demuestra la necesidad de impulsar el panorama de la financiación en Europa. “Europa tiene muchas empresas emergentes innovadoras y talentosas, pero con demasiada frecuencia estas empresas permanecen pequeñas o se trasladan a otro lugar”, ha afirmado Mariya Gabriel, comisaria de innovación, investigación, cultura, educación y juventud.
La empresa francesa CorWave, que trabaja en la atención de pacientes con insuficiencia cardíaca potencialmente mortal, fue la primera en recibir la inversión. Un apoyo de 15 millones de euros del fondo EIC, que eleva la recaudación total (pública y privada) a 35 millones de euros. Se trata de un caso que la Comisión considera ejemplar para evidenciar la importancia de que ambos sectores co-inviertan en la red empresarial europea.
El objetivo que persigue la CE con esta batería financiera es alentar a los inversores privados a unirse a ellos para respaldar a las empresas, reduciendo el riesgo de inversiones, en particular para las empresas deep tech, donde los rendimientos son a más largo plazo que otras nuevas empresas.
Entre las otras empresas que recibirán inversiones se encuentran Hiber, una empresa holandesa que construye satélites internacionales y sistemas de comunicación; la empresa francesa Xsun, que diseña drones independientes de la energía para que sean totalmente autónomos para que puedan operar sin ninguna intervención humana; y la startup irlandesa Geowox, que proporciona propiedad automatizada.