Andalucía Emprende, fundación dependiente de la Consejería de Universidad, Investigación e Innovación, ha puesto en marcha la cuarta edición de ‘Emprende Agile’, un programa de formación ágil que ha permitido ayudar a 246 emprendedores en el conjunto de sus ediciones, acortando los ciclos de desarrollo de sus proyectos de emprendimiento.
El programa, basado en la metodología ‘Lean Startup’, tiene como objetivo que las ideas iniciales de los emprendedores puedan validarse con el mercado de una manera «rápida», mediante una combinación de experimentación impulsada por hipótesis para medir el progreso, el lanzamiento de productos iterativos para ganar retroalimentación de los clientes y aprendizaje validado para medir cuánto se ha aprendido, según ha detallado este sábado la Junta en una nota.
De esta manera, los emprendedores participantes van teniendo clientes y van minimizando la inversión inicial a medida que van enfocando su propuesta de valor, según ponen de relieve desde la Administración andaluza.
La cuarta edición de este programa, que se está desarrollando durante este mes de marzo, consta de cinco talleres que se imparten de manera telemática. Los objetivos de estos talleres van desde dotar a los emprendedores de herramientas que les permitan valorar si su idea puede convertirse en una empresa viable para que pueda desarrollarse con éxito en el mercado, hasta enseñarles metodologías y técnicas para el lanzamiento del negocio a partir de un modelo de negocio propuesto.
Asimismo, este programa permite, según subraya la Junta, capacitar y acompañar a los emprendedores en el proceso de cambio de la visión del negocio, generalmente enfocada hacia el producto o servicio, para que centren la actividad en el cliente.
También les ayuda, mediante una serie de criterios, a que sean capaces de segmentar el mercado según el tipo de clientes, así como a elegir por cuál empezar y conocerlo en profundidad. Además, los orienta en la construcción de una propuesta de valor basada en la fórmula cliente-problema-solución para que identifiquen la diferencia de su negocio respecto a la competencia y conozcan sus fortalezas y debilidades; y ofrece sistemas de gestión del riesgo y la incertidumbre.
En términos de contenido, estos talleres abordan el valor de los modelos de negocio en la innovación; introducen el concepto ‘Producto Mínimo Viable’ en el proceso de emprendimiento, con metodologías ágiles como ‘Canvas’ y ‘Lean Startup’, que les permiten «minimizar tiempo, riesgos y costes y dan claves para arrancar un proyecto con pocos recursos determinando, previamente, maneras de verificar si el producto o servicio da una respuesta útil a una necesidad real y si los clientes identificados están dispuestos a comprarlo». Para ello aprenden a diseñar prototipos y conocen métricas que les permitan identificar si van por buen camino (‘Bootstrapping’).
Además, les capacitan para desarrollar un plan de acción, ofrecen métricas que faciliten el control y evaluación del proyecto, al tiempo que facilitan herramientas y recursos para una comunicación efectiva como parte de la estrategia del negocio.
PERFIL DE LOS PARTICIPANTES Y GRADO DE SATISFACCIÓN
El perfil mayoritario de los emprendedores que se han beneficiado de este programa responde al de una mujer (60%), joven –de edades comprendidas entre los 30 y los 45 años– y con formación básica. Un 25% de ellos han sido universitarios.
La evaluación que han realizado de su participación en el programa ha sido «muy positiva», valorando especialmente cómo les ha ayudado a transformar la idea inicial en otra viable, a identificar quién es el cliente y dónde se encuentra y a aprender, de un modo práctico, a minimizar las inversiones iniciales. Destaca también notablemente la formación recibida para poder realizar una comunicación eficaz del proyecto, según ha detallado la Junta.