S.lab, finalista de Alhambra Venture 2023, usa cáñamo y micelio para crear un envase similar al poliestireno
El 73% de la basura de las playas de todo el mundo es plástico, según National Geographic. Filtros de colillas, botellas, tapones, envoltorios, bolsas de la compra y recipientes de poliestireno. Una playa paradisiaca llena de plástico fue precisamente el punto de partida para la creación de S.lab, una startup que ha creado un sustituto del poliestireno a base de elementos naturales y biodegradables.
El proyecto, finalista de Alhambra Venture 2023, ha desarrollado un tipo de envase ecológico, que consiste en solo dos componentes de origen vegetal: el cáñamo y micelio, una estructura de hongos. Cuando se mezclan ambos, se obtiene un material muy resistente y fiable, que puede sustituir al poliestireno. De hecho, tiene las mismas características en cuanto a durabilidad, impermeabilidad y aislamiento térmico, pero siendo materiales 100% biodegradables. Una vez utilizado, puede tirarse con el resto de la basura y se descompone por completo en solo 30 días.
Las estimaciones de cuánto dura el plástico varían del mínimo de 450 años a siempre. El poliestireno no es reciclable, por lo que todo lo que se ha fabricado sigue en algún lugar de un vertedero, contaminando el suelo o el océano.
El objetivo de la Unión Europea es que para 2030 todos los envases sean reciclables o reutilizables, buscando que en 2040 se logre reducir en general los desechos de embalaje un 37%. Esto deja claro el futuro del plástico con políticas de transición ecológica y la importancia de estas alternativas.
Los fabricantes buscan soluciones. El mercado de los envases sostenibles es el que crece con más rapidez, ya que, según S.lab, aumenta un 15% cada año. Queda claro que hay demanda, pero la mayoría de las alternativas presentan dos problemas. Por un lado, no son totalmente biodegradables, puesto que solo contienen entre un 30% y un 40% de ingredientes naturales y requieren un largo proceso de compostaje industrial en cisternas especiales. Además, no pueden producirse en cantidades industriales.
Ambas problemáticas se resuelven con el producto de esta startup.
Anticiparse a la demanda
En S.lab busca suministrar embalajes a cualquier empresa que los necesite para vender, entregar o transportar sus productos. Desde el sector de la belleza y cosmética a electrónica, alimentación, farmacéutica y comercio electrónico general.
Para dar respuesta a la demanda, necesitan construir una línea de producción automatizada en la que poder producir los envases a escala industrial. Ese es el objetivo actual en el que están sumergidos. Saben que el sector va a crecer y quieren estar preparados para satisfacer las necesidades.
Actualmente, ya cuentan con clientes recurrentes mensuales, así como una lista de espera de los clientes potenciales que querrían empezar a trabajar con ellos cuando tengan en marcha la línea de producción automatizada. Además, están inmersos en proyectos piloto con empresas internacionales de la talla de L’Oréal o Samsung. Aunque están enfocados en los envases, la startup también emplea este producto en elementos decorativos, macetas e incluso ha llegado a desfiles de moda en forma de complemento para las pasarelas.
Mientras tanto, ya están trabajando en una tecnología de hardware, para optimizar la línea de producción y adaptarla a una mini fábrica situada en un contenedor de 12 metros que puede instalarse en las instalaciones de los clientes y producir los envases desde allí. También investigan nuevos materiales en el proyecto, como cartón, cuero o espuma.
La startup es de origen ucraniano, pero está asentada en el Centro Andaluz de Emprendimiento de Coín, donde ha establecido su línea de fabricación. Ya participó el año pasado en Alhambra Venture, siendo la mejor startup en economía circular y vuelve como finalista sabiendo la importancia del evento y el alcance de los contactos que se pueden llegar a hacer. Así, vuelve al Palacio de Congresos los 4 y 5 de julio, buscando nuevos inversores o incluso colaboradores para dar a conocer el proyecto.
