El Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, a través de la Secretaría de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial, ha superado los 100 proyectos de emprendimiento femenino digital financiados a través de la línea ENISA, adscrita al Ministerio de Industria. Este programa destinará hasta 51 millones de euros en los próximos tres años para romper la brecha del acceso a la financiación de las emprendedoras en el ámbito digital. En 2022, el presupuesto destinado ascendió a 17 millones de euros.
La línea ENISA Emprendedoras Digitales está dirigida tanto a empresas de nueva creación como aquellas que estén considerando un proyecto de consolidación, crecimiento o internacionalización.
La puesta en marcha de esta línea tiene como objetivo favorecer los proyectos empresariales promovidos por una o varias mujeres que ostenten una posición relevante de liderazgo o de poder dentro de la sociedad: en el accionariado, en el órgano de administración o formando parte del equipo directivo.
Entre las empresas que han logrado obtener un enisa en 2022 a través de la línea Emprendedoras Digitales se encuentran PlayFilm; Freeme; BCome; eAgora Algorisme del Canvi o Lekkid, entre otras. Por ende, son una muestra de algunos de los casos de emprendimiento femenino financiados por ENISA en sus etapas iniciales o en sucesivas fases de expansión.
Se trata de empresas centradas en el desarrollo y comercialización de herramientas tecnológicas innovadoras. Startups de cualquier sector (no necesariamente tecnológico), estén inmersas en un proceso de adaptación a las nuevas tecnologías, con el objeto de mejorar o aumentar su competitividad y eficiencia, que podrán contar con la financiación necesaria.
PRÉSTAMOS PARTICIPATIVOS
El instrumento financiero, gestionado a través de ENISA, es el préstamo participativo, con importes entre los 25.000 y 1.500.000 de euros. Además, no exige más garantías que las del propio proyecto empresarial y un equipo gestor solvente.
Las empresas deben tener su domicilio social en España y presentar proyectos empresariales viables técnica y económicamente. Asimismo, deben tener un modelo de negocio innovador, novedoso o con claras ventajas competitivas.
La realidad es que la participación de mujeres en empresas emergentes de base tecnológica es aún baja. Según los últimos datos recabados en el Mapa de Emprendimiento 2022 tan solo un 18 % de las startups tecnológicas han sido fundadas por mujeres, aunque estas últimas fracasan menos que las fundadas por hombres (27 % vs 59 %).
Es necesario seguir poniendo en marcha medidas que impulsen el emprendimiento digital femenino y reduzcan la brecha de género existente en este ámbito. Este es uno de los grandes objetivos de la estrategia España Digital 2025, así como del Plan de Digitalización de Pymes y del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia en los que se enmarca esta nueva línea de financiación.